Ya sea que prefieras viajar ligera o con más peso, siempre que emprendes un viaje lo que realmente quieres es simplemente (¡sé honesta y admítelo!) llevarlo todo contigo. ¡Y sucede con frecuencia que TAMBIÉN quieres tener suficiente espacio para traer aún más de lo que te llevaste!
No es de extrañar que se haya convertido en una verdadera tendencia en internet con #packwithme y contenido similar apareciendo en todas las redes sociales. Crea una profunda sensación de satisfacción mientras los vemos, cómo organizan su ropa, accesorios y otros artículos de belleza en bolsas o estuches antes de colocarlos al estilo Tetris en sus maletas o bolsos.
¿A ti también te gustaría convertirte en una experta? Te ofrecemos algunos consejos útiles...
Paso #1: Calcula la cantidad de días que pasarás en tu destino (¡hasta ahora, todo bien!). ¡Esto te permitirá calcular la cantidad de conjuntos y cambios de ropa que necesitarás llevar y te permitirá decidir el tamaño de la maleta que deberás elegir!
Paso #2: Coloca todas tus pertenencias en tu cama (¡dobladas por favor! No es mucho pedir, ¿verdad?) y mantén los diferentes tipos de ropa separados: pantalones/faldas, camisetas y otras blusas, ropa interior, etc. ... ¡Asegúrate también de guardar tus zapatos en bolsas para mantener limpias el resto de tus pertenencias!
Paso #3: Para los más organizados, guarda tu ropa en organizadores de viaje. Te ayudarán a mantener tu ropa en su lugar, harán que sea más fácil encontrarla e incluso mantendrán tu ropa sucia y limpia separada cuando viajes de regreso a casa.
Paso #3b: Para aquellos menos organizados, simplemente coloca tus diferentes montones de pertenencias en tu maleta o bolso en un orden determinado:
- Las prendas más pesadas y voluminosas, como zapatos o vaqueros, deben colocarse en la parte inferior,
- Las prendas más ligeras o sensibles a las arrugas, como camisas o chaquetas, deben ponerse encima.
- La ropa interior y los pequeños accesorios deben colocarse a los lados o utilizarse para llenar los espacios vacíos.
- Las prendas frágiles se colocan mejor en el centro, entre capas de ropa, para protegerlas lo máximo posible de los golpes.
Otro consejo útil
Y aquí es donde te oímos exclamar: "cada uno por su lado"; también puedes simplemente enrollar la ropa (la técnica del "mochilero"). ¡Es una buena forma de reducir el espacio que ocupan! Esta puede ser una buena solución si no tienes intención de deshacer todas tus pertenencias nada más llegar a tu destino.
Paso #4: ¿Qué pasa con el neceser? Aquí es donde las cosas se ponen un poco complicadas. ¿Vas a tomar un avión y solo tienes una maleta o bolso de mano? No olvides guardar tu bolsa de líquidos transparente y ponerla encima de todo lo demás, para evitar que la seguridad del aeropuerto revise todas tus pertenencias 😉.
Si viaja con una maleta en la bodega, trata el neceser como un artículo voluminoso en el paso 1 y guárdalo en el fondo de tu bolso.
Por último, para garantizar un viaje cómodo, ten a mano lo esencial: billete, pasaporte, cargador de teléfono, etc., metiéndolos en el bolsillo interior o exterior de tu maleta.
Un pequeño consejo extra
¿Por qué no utilizar organizadores de viaje de dos colores diferentes, uno para la ropa limpia y otro para la ropa sucia?
¡Eso es todo! Y ahora... ¡¡¡vete a hacer las maletas!!!